viernes, mayo 02, 2008

Sin Titulo

Hoy no hay título, porque no hay nada que escribir, pero no confundir con vacío, porque vacío es vacío y nada es nada, y a veces nada es sólo nada y vacío es más nada de todo que todo vacío, cómo a veces me siento... vacío, pero no me puedo sentir en nada, la nada es más efímera que el vacío y el vacío es más que ausencia, y la ausencia es la falta de algo que uno tuvo... o que tal vez nunca tuvo y creyó tener, pero sigue siendo ausencia, y no es nada, es falta de algo.

Nada es pérdida o carencia, o no es ni lo uno u lo otro, es silencio latente, perseguido por el atento escándalo que sigue del rumor, murmullo de cosas, susurro de imágenes que quieren mostrarse en cualquier momento y permanecen vergonzosas tras los biombo. Es, a veces, calma o llanto, tristeza o resignación, saberse perdido esperando la sentencia, es un pedazo de alma resguardado para algo que no vendrá, porque no sabemos lo que és, pero tenemos la esperanza de que llegará.

Vacío es rabia o impotencia, temor arraigado en lo más porfundo por el mismo temor, la impotencia de verse y no saber que se está viendo, es la ausencia marcada en el corazón, que también está ausente, es aquel bucle positivo que acrecienta el tobellino de confusión, porque el vacío produce confusión, y la confusión no permite pararce frente a uno mismo y verse y analizarse y saber que es lo que falta, es observar el reflejo vampiresco de uno mismo, y eso es peor que el vacío en si mismo.

Pero no hay título, porque quería escribir algo y se me olvidó que era, y eso es nada, pero no es no quiera escribir nada, simplemente había algo importante que expresar que ya no está, y por eso me disculpo... como siempre disculpandome por todo...o nada?